Descansa tu pie en una silla, o en una bañera. Siéntese lo suficientemente cerca para mantener la pierna doblada para poder alcanzar el tobillo sin esfuerzo.
Empieza siempre por abajo y mueve a Colibry de atrás hacia adelante, y de adelante hacia atrás, progresando hacia la rodilla.
¡Siempre enfócate en áreas pequeñas hasta que estén completamente libres de pelo!